Decálogo de buenas prácticas digitales para niños, niñas y personas con discapacidad.

En la era digital, donde la tecnología está presente en todos los ámbitos de nuestra vida, el uso responsable y seguro de las herramientas tecnológicas se ha convertido en una necesidad ineludible. Para niños y niñas en edad escolar, este aprendizaje no solo contribuye a su desarrollo académico, sino que también les permite adquirir competencias esenciales para su futuro personal y profesional. Sin embargo, también plantea retos significativos, especialmente para aquellos en situaciones de mayor vulnerabilidad, como las personas con discapacidad.

Las buenas prácticas digitales son más que un conjunto de recomendaciones; son un pilar fundamental para garantizar que las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) sean inclusivas, accesibles y seguras para todos. En el caso de los niños y niñas con discapacidad, estas prácticas adquieren una relevancia crítica, ya que su mayor exposición a riesgos, como el ciberacoso, la desinformación y las barreras de accesibilidad, demanda una atención específica. Trabajar en su formación digital no solo promueve la equidad, sino que también fortalece su autonomía y confianza en un entorno cada vez más tecnologizado.

Por tanto, integrar estas buenas prácticas en el ámbito educativo se convierte en una estrategia clave para prevenir riesgos, fomentar un uso ético y promover un acceso equitativo al conocimiento. A través de una educación digital que priorice tanto la seguridad como la inclusión, no solo formamos usuarios responsables, sino también ciudadanos digitales capaces de construir una sociedad más justa y solidaria.

Decálogo de Buenas Prácticas Digitales en Educación Primaria

(Basado en la normativa y recomendaciones de la Junta de Extremadura y legislación educativa actual)


  1. Fomentar el uso responsable y seguro de la tecnología
    Promover el conocimiento y respeto de las normas básicas de seguridad digital, como no compartir información personal, utilizar contraseñas seguras y respetar la privacidad de los demás.
  2. Integrar las TIC en los procesos de enseñanza-aprendizaje
    Usar herramientas digitales para enriquecer las experiencias de aprendizaje, como plataformas educativas, recursos interactivos y metodologías activas que potencien la participación del alumnado.
  3. Garantizar la accesibilidad digital para todos los estudiantes
    Adoptar recursos y tecnologías que sean inclusivos, garantizando que alumnado con discapacidades o necesidades educativas especiales tenga acceso a los contenidos y actividades digitales.
  4. Fomentar la alfabetización digital
    Enseñar a los estudiantes habilidades básicas de uso de herramientas tecnológicas, búsqueda de información en línea, pensamiento crítico y verificación de fuentes confiables.
  5. Promover el uso ético y responsable de la tecnología
    Inculcar valores como el respeto, la empatía y la responsabilidad en la comunicación digital, evitando el ciberacoso y promoviendo el buen trato en línea.
  6. Establecer límites y tiempos saludables de uso digital
    Evitar la sobreexposición a dispositivos electrónicos en la escuela y en casa, fomentando un equilibrio entre actividades digitales y otras formas de aprendizaje o recreación.
  7. Favorecer el trabajo colaborativo mediante herramientas digitales
    Utilizar plataformas y aplicaciones que permitan el trabajo en equipo, fomentando la comunicación, el respeto por las ideas de los demás y la cooperación en entornos digitales.
  8. Garantizar la protección de datos y la privacidad
    Respetar la normativa vigente sobre protección de datos personales (como el RGPD), asegurándose de que las herramientas utilizadas cumplan con los estándares de seguridad y privacidad.
  9. Formar al profesorado en competencias digitales
    Proveer formación continua y actualizada a los docentes sobre el uso de herramientas tecnológicas, recursos digitales y estrategias pedagógicas innovadoras.
  10. Involucrar a las familias en la educación digital
    Ofrecer a las familias orientación sobre el uso seguro y positivo de la tecnología, promoviendo su implicación en el proceso educativo digital de sus hijos.

Este decálogo está alineado con las recomendaciones del Marco Europeo de Competencia Digital Docente (DigCompEdu), la Ley Orgánica 3/2020 (LOMLOE) y los principios de la Estrategia de Transformación Digital Educativa de Extremadura (INNOVATED).

Esteban Holgado Tomé

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